Conciencia y sentimientos
Después de mi apunte sobre la Conciencia y pensamientos, estuve más pendiente de la aparición de sentimientos y anoté lo que iba encontrando durante la meditación. Voy a tratar de explicar lo que noté.
Hubo dos sensaciones que yo encajaría normalmente como sentimientos: alegría y tristeza. Las dos aparecieron como resultado de pensamientos involuntarios. Desafortunadamente, no anoté nada sobre el contenido de esos pensamientos y ahora no recuerdo de qué se trataban.
De los sentimientos se generaron reacciones físicas. De la alegría, risa; de la tristeza, ganas de llorar.
Los de tristeza parecen ser similares a los pensamientos involuntarios en que amainan cuando se perciben y, casi al instante, desaparecen. No sé si pueda decir lo mismo del sentimiento de alegría que desencadena la risa, porque parece ser naturalmente corto, así que no puedo decir si es la percepción la que lo amaina. La tristeza, en cambio, dura y engorda, tal vez con pensamientos accionados por ella misma. Quién sabe si la duración de la tristeza comparada con la de la alegría se deba a un rasgo personal (yo no me considero una persona alegre).
Entre ayer y hoy he sentido tranquilidad, algo que yo normalmente encajaría también entre los sentimientos. Pero la tranquilidad me parece rara cuando la comparo con la alegría y la tristeza porque se parece a los pensamientos voluntarios en que la percepción no la hace desaparecer. Y dura. Con tranquilidad me refiero a la sensación que da quitarse un peso de encima, o lo que siente uno cuando termina bien algo que considera importante. La tranquilidad acciona recuerdos de experiencias en la vida que han resultado en tranquilidad para mí.
Como la alegría, la tristeza y la tranquilidad me parecen tan diferentes entre sí, me pregunto si la categorización de sentimientos, igual que con los pensamientos, no será más bien el resultado de la educación y no de la observación propia de la realidad. Similar al hecho de pintar árboles con tronco café y hojas verdes.
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